domingo, 21 de abril de 2013

Cuento sobre el amor al prójimo: ¿Por qué Dios permite éstas cosas?


Por la calle vi a una niña muy pobre,  tiritando de frío dentro de un ligero vestidito y con pocas perspectivas de conseguir una comida decente.

Me encolericé y le dije a Dios: 
¿Por qué permites estas cosas? 
¿Por qué no haces nada para solucionarlo? 

Durante un rato, Dios guardó silencio. 

Pero aquella noche, de improviso, me respondió: 

Ciertamente he hecho algo…Te he hecho a ti.     

Fuente: sopa de pollo para el alma
imagen: morguefile 

No hay comentarios:

Publicar un comentario